La Asociación para Residencias de Pensionistas Ferroviarios (ARPF) es una entidad sin ánimo de lucro fundada en 1931, con el objetivo de facilitar la atención, el cuidado y el acompañamiento a las personas mayores que lo necesitan.
Aunque nació vinculada al ámbito ferroviario, hoy está abierta a todas las personas interesadas, tengan o no relación con el sector. Actualmente, ARPF cuenta con más de 14.000 personas socias en toda España.
Las aportaciones de las personas socias se destinan íntegramente a la mejora continua de las instalaciones, los servicios y la calidad de vida de las personas residentes.
Gestionamos dos centros residenciales propios:
- Residencia San Juan (Alicante)
- Residencia Águilas (Murcia)
En ambos centros trabajamos para garantizar estancias dignas, seguras y personalizadas, promoviendo el envejecimiento activo y una atención integral a personas mayores y personas en situación de dependencia.
👉 Conoce el funcionamiento de La Asociación.
Misión, visión y valores
La Asociación tiene por objetivo facilitar la calidad de vida de los/as socios/as, durante la estancia temporal o permanente, en las plazas disponibles en sus Centros, conforme a los requisitos que reglamentariamente se determinen. Para lo que se dotará, por los órganos competentes, de los medios económicos, técnicos administrativos y de gestión que se consideren necesarios para garantizar la sostenibilidad de los Centros, a través del buen uso de estos medios.
La Asociación mantendrá una mejora permanente de los
servicios a los/as socios/as, en las plazas disponibles a las que puedan acceder, disponiendo dentro de sus presupuestos los recursos necesarios para la realización de dicha prestación de servicios, atención y cuidados.
El fomento de los valores humanos será una de las señas de identidad de la Asociación, destacando la solidaridad intergeneracional, la igualdad, la justicia y la tolerancia.
Nuestra historia
ARPF nace el 10 de marzo de 1931, en una España marcada por profundos cambios sociales y políticos, en el contexto de la proclamación de la II República.
Desde sus orígenes, las personas fundadoras tuvieron una visión clara y adelantada a su tiempo: crear centros residenciales donde las personas mayores pudieran vivir esta etapa de su vida con dignidad, seguridad y acompañamiento.
A lo largo de más de 90 años de historia, ARPF ha mantenido intacto su espíritu fundacional: el compromiso solidario de las personas socias, que con sus aportaciones han hecho posible la creación y el sostenimiento de los centros.
Hoy, seguimos fieles a ese propósito: ofrecer un entorno donde el cuidado, el respeto y la dignidad humana estén siempre en el centro.
